El patrimonio que viste las calles de Valladolid: estatua del Conde Ansúrez

Valladolid cuenta con numerosas estatuas y esculturas a lo largo y ancho de la capital. Muchas veces, los transeúntes pasan por su lado y se quedan impresionados por las tallas que se exponen al aire libre, aunque en muchas ocasiones, desconocen la historia y datos que esconden cada una de ellas. Cada fin de semana, este periódico te contará las curiosidades más destacadas de las estatuas vallisoletanas para que así conozcas mejor los secretos que guardan. En esta entrada inaugural de nuestra sección conocemos la estatua por excelencia para la gran parte de los vecinos de Valladolid como es la del Conde Ansúrez.

La idea de situar un monumento al fundador de Valladolid, el Conde Ansúrez, surgió en el Siglo XIX con varias propuestas y diferentes ubicaciones, pero las dificultades económicas y diferencias políticas, no permitieron llevar a cabo el proyecto hasta 1903, fecha en la que fue inaugurada oficialmente, a pesar de que su aprobación fue en 1901 debido a problemas de suministro de bronce y a la controversia por la autoría del pedestal. La estatua original que homenajea a Pedro Ansúrez, situada en el corazón de la Plaza Mayor es obra del escultor vallisoletano Aurelio Rodríguez Vicente-Carretero, quien ofreció la idea tres años antes al Ayuntamiento para erigir este monumento.

La estatua del Conde Ansúrez pertenece al estilo del Realismo con materiales de bronce y piedra granítica. Es de sencilla concepción y fue trazada con líneas vigorosas y ausencia de ornamentos externos. Tan solo el fundador porta el pendón del reino de Castilla y el documento de fundación de Valladolid. De esta manera, la idea del escultor era realizar una obra que siguiera la realidad sin elementos que distrajeran la atención de los que la miran. El vestido es a la usanza de la época de Alfonso VI y el cuerpo se encuentra inclinado hacia atrás con la pierna derecha ligeramente adelantada.

El soporte de esta escultura vallisoletana es de base cuadrangular y fue elaborado con piedra del municipio de Campaspero, según el proyecto del que fuera arquitecto municipal Agapito y Revilla. El monumento contiene relieves labrados en bronce en cada cara que representan dos momentos destacados de la vida del Conde Ansúrez. Uno de ellos es la presentación de Pedro Ansúrez ante el Rey, y la construcción de la Iglesia de Santa María la Mayor con una descripción dedicada al escudo y al monumento.

El entorno del monumento ha variado a lo largo del tiempo desde su inauguración a principios del Siglo XX, y tres años después de su estreno se colocó una verja de hierro que acotaba la estatua. Más tarde fue sustituida por un jardín que, posteriormente, también fue modificado y actualmente luce sobre una pequeña base en altura con escalones para auparla a lo alto de la Plaza Mayor de Valladolid. Como curiosidad, la estatua del Conde Ansúrez es también protagonista durante las Fiestas de la Virgen de San Lorenzo del mes de septiembre, y en el último día es tradición que una figura destacada de la ciudad se suba a retirar la pañoleta como cierre de fiestas.