El Ayuntamiento de Valladolid reduce a una tercera parte las dimensiones de la Zona de Bajas Emisiones frente al anterior perímetro

La reducción de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) se ha conformado finalmente en un perímetro de 1,1 kilómetros cuadrados por parte del actual equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Valladolid. La propuesta de PP y Vox reduce a una tercera parte el perímetro planteado por el anterior Gobierno de Óscar Puente, cumpliendo igualmente, tal y como han explicado el concejal de Tráfico y Movilidad, Alberto Gutiérrez Alberca, y el concejal de Comercio, Mercados y Consumo, Víctor Martín, el contenido mínimo exigido en el RD 1052/22 de 27 de diciembre, por el que se regulan las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en el territorio nacional. Así, el actual Gobierno de Carnero cumple su «compromiso» de reducir la ZBE en la ciudad de Valladolid, como anunciaron ya en campaña electoral y reflejado en el pacto de coalición entre el Partido Popular y Vox.

El proyecto de la nueva ordenanza de la ZBE, a la cual se han presentado 400 alegaciones durante el periodo de consulta pública, se llevará a la Junta de Gobierno del próximo lunes 4 de diciembre para ser aprobada posteriormente en el Pleno ordinario del 18 de diciembre. Tras la tramitación se procederá a un periodo transitorio de 6 meses hasta su implantación definitiva, que en este sentido, el concejal de Tráfico y Movilidad no ha querido adelantarse a fijar plazos ni previsiones. La nueva limitación de la ZBE en Valladolid que se ha presentado este viernes pasa a incluir 28 calles y plazas de la capital vallisoletana, con menos superficie que la propuesta anteriormente por PSOE y VTLP.

De esta forma, la nueva propuesta de ZBE para Valladolid comprenderá la Plaza de Zorrilla, calle María de Molina, calle Doctrinos, Paseo de Isabel la Católica, calle San Quirce, calle Esteban García Chico, Plaza de San Pablo, calle Cardenal Torquemada, calle Rondilla de Santa Teresa, calle Gondomar, calle Chancillería, calle Ramón y Cajal, calle Colón, calle Cardenal Mendoza, Plaza del Colegio de Santa Cruz, calle La Merced, calle Pedro Barruecos, calle Alonso Pesquera, Plaza de la Cruz Verde, calle Labradores, calle Acibelas, calle Cadena, calle Párroco Domicio Cuadrado, calle Vega, calle Panaderos, Plaza de España, calle Miguel Íscar y Plaza de Zorrilla. También, el Ayuntamiento ha destacado en esta nueva limitación quedan fuera de la ZBE los principales hospitales de la ciudad, la mayoría de los colegios y la estación de ferrocarril, «abiertos a la modificación de exenciones y las respectivas alegaciones de los afectados», ha subrayado Alberca.

El edil Gutiérrez Alberca ha explicado que la propuesta responde a cada uno de los aspectos exigidos como contenido mínimo por el Anexo 1 del RD 1052/22 de 27 de diciembre, y «que contribuirá a la mejora de la calidad del aire en la ciudad, ya que se trata de un proyecto con objetivos cuantificables de calidad del aire, ajustándose a una delimitación menos restrictiva que las anteriores contempladas, y que respeta el principio de proporcionalidad, tratando de distorsionar lo menos posible la actividad económica». Por su parte, el concejal de Comercio, Víctor Martín, ha señalado que la nueva ZBE «se circunscribe al ámbito mínimo al que ha quedado vinculada Valladolid, por la recepción del anterior equipo de Gobierno de fondos europeos«, y ha incidido en que «la responsabilidad del Ayuntamiento de Valladolid, como Administración, es no perderlos, consecuencia inexorable si se redujera más el ámbito de influencia de la ZBE, tal y como hubiera sido el deseo del actual equipo de Gobierno».

Según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, de 150 ciudades españolas que deben crear sus respectivas ZBE, sólo 15 la tienen implantada a esta fecha, 18 ni la han implantado ni han iniciado su tramitación, y el resto, entre las que se incluye Valladolid, se encuentran en proceso de tramitación. La nueva Ordenanza por la que se regula una ZBE en el municipio de Valladolid se incluirá en el orden del día de la Junta de Gobierno Local y con posterioridad se someterá al Pleno para su aprobación definitiva. «El texto recogerá restricciones no absolutas y no se sancionará en principio a los infractores», ha añadido Martín. Asimismo, los ediles han remarcado que se cumple con los «plazos de la normativa» -Ley 7/2021 de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética, los municipios de más de 50.000 habitantes-, en base a la obligación legal de adoptar antes de 2023 planes de movilidad urbana sostenible para introducir medidas de mitigación que permitiesen reducir las emisiones derivadas de la movilidad incluyendo al menos el establecimiento de ZBE antes de 2023.

El «retraso» por parte del Estado para desarrollar normativamente las pautas que han de seguir los proyectos de ZBE en España, ya que hasta diciembre de 2022 no existió una regulación detallada, así como la «complejidad técnica» que presentan los proyectos de ZBE, teniendo en cuenta su trascendencia en el ámbito social, económico y de la movilidad, son algunas de las dificultades a las que han tenido que hacer frente los ayuntamientos españoles, para llevar a cabo dicha implantación. Por último, en cuanto a las restricciones de vehículos afectados, Alberca ha apuntado que «los plazos serán más flexibles», puesto que las propias normativas europeas están cambiando y la ausencia vehículos eléctricos en los sectores de transporte mercancías implican «revisiones». Aun así, también el concejal ha asegurado que serán «restrictivos con aquellos vehículos que no tengan etiqueta» no solo por la zona, sino también por la seguridad vial.