Santovenia de Pisuerga sigue marcada por aquel negro 1 de julio en el que la localidad se encontraba inmersa en una violenta jornada a manos de P.A.S.H., conocido como ‘El Chiqui’ que mató a tiros a dos hombres, un vecino del municipio D.A. y al teniente coronel de la Guardia Civil P.A.C. Cuarenta días después del doble crimen de Santovenia, la familia del presunto homicida, actualmente en prisión, procedió a realizar la mudanza de la casa situada en la calle Alfredo Martín 8 de Santovenia y horas más tarde una mujer okupaba el domicilio.
La mujer pernoctó dos días de forma ilegal en la vivienda de ‘El Chiqui’ y la Guardia Civil procedió a su desalojo en la mañana de este jueves 11 de agosto. Según informan fuentes de La Benemérita a este periódico, el origen de esta mujer es desconocido y por el momento no se ha determinado si tiene alguna relación familiar o personal con la familia de ‘El Chiqui’.
Y es que este bloque de vivienda en Santovenia de Pisuerga , así como otros colindantes, sufren un problema de okupación desde hace años, como han venido denunciando los vecinos de la localidad vallisoletana. El presunto homicida de Santovenia entró en el año 2012 en la vivienda de manera ilegal, al igual que D.A., el hombre de 45 años que fue asesinado en el portal en la madrugada del pasado 1 de julio por su amigo y vecino ‘El Chiqui’. Tras residir durante varios años de okupas, las familias de ambos llegaron a un acuerdo con la promotora del inmueble en el que formalizaron un alquiler social de alrededor de 200 euros al mes.
En este sentido, los vecinos de Santovenia de Pisuerga han protestado en varias ocasiones bajo el lema ‘Santovenia no se okupa’ con manifestaciones y concentraciones, ante los problemas en las zonas de la calle Alfredo Martín o calle Paraíso. Además, han reclamado siempre más seguridad y vigilancia en el municipio, y tras estas demandas históricas, la localidad ha sufrido desgarradores crímenes en plena calle.
