El Ministerio de Sanidad ya ha anunciado el fin del uso de las mascarillas en centros sanitarios y farmacias después de tres años, aunque su utilización todavía se mantiene bajo recomendación. A partir de las próximas fechas, ya no será necesario la mascarilla para visitar a un familiar en una residencia de mayores, acudir al hospital o simplemente para entrar en una farmacia. La decisión ha sido adoptada este viernes 23 de junio en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud y será aprobada, previsiblemente, por el Consejo de Ministros.
El uso de mascarilla solo se podrá exigir en las zonas donde pueda haber pacientes inmunodeprimidos, como las unidades oncológicas o en los quirófanos y UCI donde siempre se han utilizado. Las reacciones han sido muy variadas ante el anuncio de la eliminación de las mascarillas en los lugares donde hasta ahora eran aún obligatorias, puesto que hay personas que se alegran de la medida y otras que creen que aún hay riesgo y se debería de mantener la obligación. El uso de las mismas, propiciado por la pandemia de la Covid-19, se ha ido disminuyendo con el fin de las obligaciones en las calles, colegios, espacios públicos, transporte público y ahora en los centros sanitarios o sociosanitarios.
El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, apoyó la medida anunciada este viernes y argumentó que la emergencia sanitaria «se ha pasado» y se debe «pasar a otro punto». Sin embargo, Vázquez criticó al Ministerio de Sanidad por no incluir esta cuestión sobre las mascarillas en el orden del día del Consejo Interterritorial y que se tratara dentro del apartado de análisis de la situación epidemiológica. Además, el consejero autonómico apuntó que la decisión tomada se ajusta a las recomendaciones del mes de mayo de la Ponencia de Alertas Sanitarias y recordó que los consejeros del Partido Popular demandaron que la medida se aplicara en todo el territorio nacional, para evitar lo ocurrido en el pasado, cuando algunas restricciones eran de aplicación «en unos sitios sí y en otros no».
El titular de Sanidad en Castilla y León consideró que este Consejo Interterritorial ha sido «utilizado» por el Gobierno como una «maniobra más» de la campaña electoral ya que recordó que esta semana se han celebrado dos reuniones, una telemática y otra presencial, de este órgano, que comparten las comunidades y el Gobierno, sin que se haya tratado los problemas asistenciales y la falta de médicos que señaló afecta a todas las comunidades y que se está notando ya con la llegada del verano.
Por otro lado, el ministro de Sanidad, José Miñones, ha agradecido a los consejeros de las distintas comunidades autónomas el trabajo realizado al frente de sus departamentos durante la crisis sanitaria provocada por la Covid-19. Una vez informado el Consejo Interterritorial, y siendo secundada por todos los presentes, el Ministerio de Sanidad trasladará al Consejo de Ministros la propuesta del fin de la crisis sanitaria y el resto de medidas acordadas hasta la fecha, entre ellas precisamente la eliminación de las mascarillas.
