La Policía Nacional ha detenido a una mujer en Valladolid el pasado 11 de junio como presunta autora de un delito de estafa y finalizaba la operación con la detención de otra mujer días después como presunta autora de un delito de receptación. Hay que remontarse a finales del mes de marzo cuando una mujer denunciaba en la Comisaría Provincial de la Policía Nacional en Valladolid, la sustracción de joyas de su vivienda, unas compras realizadas online, así como retiradas de dinero en efectivo a través de cajeros ubicados en la capital sin su consentimiento ni autorización, todo ello entre los días finales del pasado mes de febrero y primeros de marzo.
La investigación se iniciaba en el mes de junio por los agentes de la Policía Nacional especializados en ciberdelitos, quienes averiguaron tras laboriosas gestiones de investigación que una persona había realizado compras y retiradas de dinero en efectivo de la cuenta de la víctima, concretamente 17 cargos por un importe total de 2.356,42 euros a través de compras en plataformas online, así como 18 retiradas en efectivo de 1.000 euros cada una de ellas, un perjuicio total de 18.466,42 euros, que según declaró la perjudicada tenía la sospecha de que podría haber sido su cuidadora. Los agentes, una vez identificada la presunta autora de los cargos y extracciones en efectivo, corroboraron que se trataba de la persona que había prestado servicios en su domicilio desde el mes de agosto del 2024 hasta casi finales de febrero del 2025 donde terminó su relación laboral. La mujer tenía acceso a la tarjeta y el pin de la misma facilitada por la propia denunciante con el fin de que realizase compras para el mantenimiento de la casa, así como en alimentación.
Tras el operativo policial se procedió a la detención de la exempleada el pasado 11 de junio como presunta autora de un delito de estafa. La investigación del paradero de las joyas sustraídas por la detenida se llevó a cabo con el apoyo de agentes especializados en este tipo de infracciones penales, que tras gestiones y diligencias de investigación pudieron comprobar que salieron al mercado para su venta. Tras pesquisas se determinó que fue la madre de la detenida quien vendió en concreto, un crucifijo y una pulsera, ambas de oro, así como varias monedas de plata, reportando un valor total de las ventas de 1.546,44 euros. Por todo ello los investigadores procedieron a la detención de la madre, una vez localizada, como presunta autora de un delito de receptación de joyas en Valladolid. Agentes de la Policía Nacional una vez documentada la investigación pasaron a disposición de la Autoridad Judicial a ambas detenidas que decretó su posterior puesta en libertad.