Ya lo dice el reconocido cocinero Ferran Adrià, «es el más sabroso que he probado en mi vida». El espárrago de Tudela de Duero es el producto típico de la localidad y forma parte de la gastronomía vallisoletana pero también nacional. Los hay de todos los tipos y gustos, el más conocido es el espárrago blanco que son una auténtica delicia para todo aquel que ha tenido el gusto de probarlos. Los espárragos tudelanos se caracterizan por su gran tamaño y grosor, y sobre todo, por su sabor delicado entre dulce y amargo.
Tudela de Duero guarda una tradición milenaria en el cultivo de espárragos, y este producto gourmet ha logrado conquistar a los paladares más exigentes de toda España. Por ello, la localidad vallisoletana no pierde el entusiasmo de que sus exquisitos espárragos estén presentes en todos los platos y mesas de nuestro país. Porque a cada uno le gustan de una manera, al natural, con un chorrito de aceite, en ensaladas, con mayonesa, con pimientos… Pero lo más importante es que sean de Tudela de Duero.
El municipio vallisoletana saca a sus calles este fin de semana, medio centenar de puestos con productos autóctonos donde el espárrago será el producto estrella pero también otras verduras y hortalizadas de la comarca estarán presentes en esta cita clásica. La XXXVIII Feria de Exaltación del Espárrago y la Artesanía de Tudela de Duero se celebrará este sábado 28 de mayo y domingo 29 con degustaciones, venta de productos de la huerta así como talleres de artesanía, música de dulzaineros e incluso rutas por las esparragueras locales para conocer todos los secretos mejor guardados.
Este año, la producción del espárrago ha sido buena ý de calidad aunque desigual, «la producción ha llegado un poco tarde y aunque vino de golpe, luego se volvió a parar por el frío y la ola de calor de estas últimas semanas tampoco ha sido muy buena», cuenta el esparraguero Enrique Belloso en declaraciones a este periódico. En la misma línea se mantiene su compañero de sector, Luis San José, quien coincide con la calidad de producción de esta temporada aunque para él no ha sido «demasiado elevada» por las irregularidades climatológicas.
La Feria de la Exaltación del Espárrago y la Artesanía abrirá sus puertas este sábado en el que se esperan la llegada en torno a 15.000-20.000 personas y promete «un fin de semana de fiesta y de buen ambiente para promocionar nuestro mejor producto, el espárrago», animan los esparragueros. Con esta cita gastronómica se pretende mostrar a los asistentes «que el espárrago no viene en bote sino que ese cultivo tiene detrás un esfuerzo muy grande durante todo el año y queremos contar cómo se cultiva, cómo nace o cómo se recoge», señala el alcalde de Tudela de Duero, Javier Gómez.
Se trata de una feria en la calle por el centro del municipio vallisoletano con el fin de que la gente disfrute del buen ambiente, pruebe y saboree los productos en una jornada única en toda la provincia. Además, esta cita que sirve como respaldo al sector primario de la zona convierte a Tudela de Duero cada último fin de semana de mayo en la capital del espárrago. Precisamente, el alcalde de Tudela de Duero es uno de los amantes y mejores embajadores de los espárragos de su municipio ya que a su juicio, y como no podía ser de otra manera, «son los mejores espárragos del mundo».
Los asistentes podrán adquirir espárragos frescos que son los de la primavera, pero también otros tipos como los de punta morada o verdes que tan ricamente saben en nuestros platos preparados. «El más preferido es el espárrago blanco porque es la estrella entre el resto», confiesa Belloso quien recomenda también probar aquellos que no tienen tanto éxitos como los de punta morada por la riqueza de su sabor y peculariedad.
Los esparragueros apuntan que a pesar del éxito de los espárragos entre los tudelanos y vallisoletanos, en nuestro país «no se consume mucho este producto y menos el fresco porque la gente opta por los espárragos en conserva. Pero en Valladolid sí porque es un espárrago que está más que introducido como un producto habitual». En sus inicios hace 30 o 40 años, «nos costó bastante que la gente los hiciera suyos y poco a poco se ha ido conociendo por esta zona hasta convertirse en un recurso alimenticio común en muchos hogares», cuenta Enrique Belloso.
Si aún no has probado los espárragos de Tudela de Duero, por mucho que hayas oído hablar de ellos, tienes una cita más que obligada para este fin de semana para disfrutar de la mejor gastronomía, artesanía, música y deporte en la localidad vallisoletana. Porque no hay nada mejor que meterse entre pecho y espalda un buen espárrago de Tudela, y si Ferran Adriá habla maravillas de ellos, por algo será.