Tres fases y con la vista puesta en otoño de 2026: las obras de la estación de autobuses ya están en marcha para lograr una imagen «renovada y confortable»

La estación de autobuses de Valladolid ya ve por fin obras en su interior para la mejora de la infraestructura. Los trabajos de arreglo y transformación de la actual terminal vallisoletana, anunciados por la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Valladolid hace un año, comenzaron el pasado 11 de abril, y supondrán una modernización de una estación, con medio siglo de historia. Los plazos de la obra están previstos que concluyan en otoño de 2026, que será cuando la ciudad de Valladolid pueda tener una terminal de autobuses acorde a los tiempos y usable para vecinos, visitantes y trabajadores. Las tareas serán ejecutadas acorde a tres fases que serán «compatibles» con el tránsito diario de los 5,2 millones de viajeros con los que cuenta anualmente la estación.

La intervención tendrá en cuenta las necesidades de los operadores de las diferentes compañías de autobuses afectadas, tanto a nivel de servicio como a nivel administrativo; a la gerencia de la estación de autobuses de Valladolid para organizar los servicios diarios de viajeros y coches; a los diferentes negocios que están establecidos en los locales comerciales de la estación, considerando la atención al público y los suministros; los recorridos peatonales de viajeros y otros usuarios de la estación, y las propias exigencias de seguridad de ejecución de las obras. Coincidiendo con el inicio de los trabajos de modernización de la terminal de autobuses de Valladolid, el consejero de Movilidad y Transformación Digital de la Junta, José Luis Sanz Merino, y el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, acompañados de la delegada territorial de la Junta en Valladolid, Raquel Alonso, el concejal de Urbanismo y Vivienda, Ignacio Zarandona, el edil de Tráfico y Movilidad, Alberto Gutiérrez Alberca, y personal de Somacyl y de las empresas constructoras han visitado hoy la infraestructura para comprobar las primeras obras que se están realizando.

En primer lugar, el alcalde Jesús Julio Carnero ha destacado en su visita la importancia y necesidad de estas obras en la estación de autobuses, que «no deja de ser una de las grandes puertas de acceso y de salida de la ciudad de Valladolid». Asimismo, ha reiterado la inversión por parte de la Junta de Castilla y León para acometer estas actuaciones de mejora que ascienden a 5 millones de euros, una cifra que Carnero considera que «expresa el compromiso y la sensibilidad de la Junta de Castilla y León con la ciudad de Valladolid en la remodelación de esta estación de autobuses». Jesús Julio Carnero también avanzó que dichas obras tienen un plazo de terminación en torno al otoño del próximo año, «y que supondrá, sin lugar a dudas, junto con la actuación que estamos acometiendo en Arco de Ladrillo o las actuaciones en Puente Colgante en relación a la plaza en torno al edificio de la ONCE, dotar a la zona de una nueva configuración y una nueva remodelación«.

Carnero y Sanz Merino observan las actuaciones en las dársenas de la estación de autobuses | Valladolid Plural

Por su parte, el consejero de Movilidad y Transformación Digital, José Luis Sanz Merino, ha informado que la intervención se divide en tres fases, con la puesta en marcha ya de la primera, por la que «se han ocupado las cuatro primeras dársenas para acopios de material de obras y residuos, se van a trasladar los locales comerciales afectados a locales vacíos, y se han redistribuido las taquillas y zonas de conteo afectadas a la parte del Paseo Arco de Ladrillo y a los despachos libres, tras demoler el cuerpo de taquillas actuales«. El acceso de viajeros puede realizarse tanto por la calle San José como por el Puente Colgante, que se convertirá en entrada única más adelante cuando continúe la segunda fase. También se van a adecuar las siete últimas dársenas para disponer después de ellas y comenzará en esta primera instancia la intervención en la cubierta de esta zona exterior. Unas mejoras, ya iniciadas, que se centran principalmente en la rehabilitación del conjunto arquitectónico, mejora de la confortabilidad y el servicio a los viajeros, de la eficiencia energética, de las condiciones de habitabilidad y salubridad, redistribución de espacios y adecuación de usos y gestión de sistemas de control.

«Las actuaciones que estamos realizando eran necesarias para modernizar una estación que es puerta de entrada a Castilla y León y que contará con una imagen renovada, y sobre todo, confortable para el usuario», ha indicado el consejero autonómico. La rehabilitación de la infraestructura vallisoletana por parte de la Junta de Castilla y León cuenta con un plazo de ejecución de 18 meses y hace posible que «cumpla con los estándares modernos de calidad y seguridad para los usuarios». Así lo ha explicado Sanz Merino, recordando que la actual estación «es la que más servicios concentra en la Comunidad con más de 5 millones de viajeros y 230.000 expedientes anuales». Además, otra de las singularidades de la obras, que ha señalado el consejero es que «se aborda desde el punto de vista funcional, formal y constructivo para conseguir una imagen unitaria y reconocible y se hará como hemos hecho en otras ocasiones manteniendo el tránsito de usuarios y el desarrollo de las obras». La mejora en la accesibilidad hace que las obras cuenten con la reordenación y cierre de dársenas. «Se modifican los accesos rodados y se crea una zona de espera exterior cubierta anexa al nuevo jardín de la calle del Puente Colgante, colindante con la terminal de viajeros», ha especificado.

Otras intervenciones consisten en la ejecución de cortavientos en los accesos al edificio de viajeros, la renovación de la iluminación del edificio de viajeros y dársenas, la renovación de paramentos verticales y techos, la dotación de nuevo equipamiento del edificio y una nueva señalética. Asimismo, el consejero ha dado cuenta de que los trabajos conllevarán la «instalación de herramientas tecnológicas de control que permitan a la estación integrarse dentro del Sistema Inteligente de Transporte, que ya está presente en otras estaciones de autobuses de titularidad autonómica». Estas herramientas sirven para facilitar información, automatizar las entradas y salidas de autobuses, el control y gestión de accesos, del flujo de viajeros a la zona de embarque y dársenas, de los autobuses y de la seguridad en la estación. Se desarrollará de manera paralela a la implementación de la tecnología en la flota de autobuses, donde la Junta de Castilla y León va a invertir más de 32 millones de euros en sistemas tecnológicos.