El Real Valladolid tiene una prueba de fuego este sábado en Zorrilla ante la visita del Atlético de Madrid para tratar de dar la vuelta a la compleja situación que atraviesa el equipo. «Sabemos la calidad que tiene. Estamos viendo si jugamos con línea de cuatro o de cinco. El equipo ha mejorado mucho con línea de cinco. Hay que ver cómo producir más. Va a ser un partido muy duro. Si te metes atrás, costará salir en transición; si vas arriba, tiene jugadores rápidos. Afrontarlo con valentía y lograr que sea una mala tarde de ellos», expresó este jueves el entrenador del Pucela, Paulo Pezzolano, en la previa del choque ante los colchoneros. El técnico blanquivioleta también habló de la expulsión sufrida la pasada jornada contra el Getafe, por la que no podrá sentarse en el banquillo este sábado.
«En el túnel no sucedió nada. A veces se sacan las cosas de contexto. Fue una charla entre entrenadores y asistentes. Estaba dentro de lo normal. Cuando pasa el entretiempo hablamos, pero no sucedió nada fuera de lugar. Se armó un tumulto que no tenía sentido. Si hubiera sido algo malo, habría sacado una roja directa». A ello apuntó que vio la segunda mitad «con la cámara táctica dentro del vestuario». Una circunstancia por la que decidió «no salir a hablar» posteriormente en rueda de prensa, algo que se encuentra dentro del reglamento. «Tenía mucha bronca, no tenía sentido ninguna de las dos tarjetas. Preferí que saliera Camilo», dijo. De hecho, pidió «más respeto», ya que señaló que el cuerpo técnico pucelano no hace «nada diferente a lo que sucede en otros banquillos«. Y es que el Pucela no logró trasladar a la segunda parte el buen trabajo de la primera en el Coliseum. «Fue un golpe duro. Teníamos la ilusión de ganar el partido. El primer tiempo fue muy bueno, tuvimos oportunidades y ellos no ocasionaron nada. En el segundo, hasta el minuto 70, estaba controlando», analizó.
«El rival encontró el gol por detalles. Nos faltaron los últimos pases para concretar las jugadas. Fue un mazazo fuerte. A trabajar de nuevo, hay que saber que son campeonatos largos», explicó el uruguayo. Un duelo ante el Getafe en el que no estuvo Amallah, circunstancia por la que el míster se refirió este jueves, confesando que «fue un tema familiar. Estaba nervioso y decidimos eso», comentó. Mientras, puso en valor el «respeto a la institución» y lo «muchísimo que ha cambiado eso», en referencia a episodios anteriores. Por otro lado, Paulo Pezzolano también expuso el crecimiento del equipo tras el inicio del curso: «Hay cosas que van evolucionando, como los jugadores jóvenes. Es importante para el futuro del Club. Ojalá sea con resultados porque sería perfecto. Lo vamos a conseguir. Sabemos que tenemos que sumar, lo que nos estamos jugando y los rivales. Hay que sufrir juntos. Se nos han ido puntos increíblemente por detalles, lo que significa que no estamos tan lejos».
Entrando en esos detalles, Pezzolano explicó que les remataban «mucho dentro del área». «Ahora hay que buscar tener más claridad nosotros. Hay que ver los detalles con los jugadores jóvenes y seguir machacando. Después de un resultado positivo, esto cambiará y vendrán las cosas buenas. El equipo va a despegar, ya nos ocurrió el año pasado», valoró. En ese sentido, el técnico blanquivioleta insistió en que busca «la solución para dar el siguiente paso». «Vamos en el camino y con un resultado sería diferente porque estarías con los equipos que tienes que estar», dijo. Para ello, tratará de superar al Atlético en la noche del sábado, cuando volverá a «tener a todos» sus futbolistas. «Están todos trabajando bien y con una intensidad muy alta«, concluyó.