Nueva vida para el Real Valladolid con Gabriel Solares y Enrique Uruñuela: «Queremos estabilizar al Club en Primera»

Punto y final al Real Valladolid de Ronaldo. Vida nueva en el Club blanquivioleta, que ha comenzado este martes 1 de julio una ilusionante etapa que ojalá esté llena de éxitos y devuelva al equipo a Primera División lo antes posible. La nueva propiedad del Real Valladolid se ha presentado hoy en sociedad, después de la primera toma de contacto con el alcalde Jesús Julio Carnero, para dar a conocer públicamente a la afición los planes de futuro de la entidad. Gabriel Solares y Enrique Uruñuela han explicado hoy en rueda de prensa los cimientos de esta nueva etapa, los co-propietarios que serán la cara visible de un consejo de administración formado por el grupo Ignite y Ben Oldman, quienes comparten el principal paquete accionariado. Además, los dueños del Pucela han estado acompañados en su puesta de largo por el nuevo director deportivo Víctor Orta, que sustituye en el cargo a Domingo Catoira.

La idea sobre la que se sostiene el Real Valladolid que hoy comienza es la de la defensa de la institución por encima de todo. «El Real Valladolid casi centenario, un Pucela del que sentirnos orgullosos. Uno que recupere el lugar que le corresponde en el fútbol español, asentado en Primera División», es el principal objetivo de la nueva propiedad, que no se marca plazos pero sí promete trabajar duro para ello. La hoja de ruta para conseguirlo es la de la profesionalización, la de recuperar un Club «que tenga perspectiva social, que sea símbolo de identidad y de orgullo para todos los vallisoletanos, un referente de Castilla y León, catalizador social de las personas que son parte de él». Para ello, Solares y Uruñuela proponen un cambio en el modelo de gestión. Desde la amplia trayectoria de los dos directivos, con experiencia en ámbitos financieros, administrativos y jurídicos, quienes unirán sus fuerzas en el liderazgo al frente de la entidad blanquivioleta, el proceso implica «la institucionalización del Club, comunicación transparente y clara, profesionalizar la gestión, diversificar ingresos y ser eficientes en el gasto».

«No habrá personas por encima de la institución», insistieron. «Ningún interés personal» por encima del Real Valladolid, todos con el objetivo claro y trabajando de la mano para conseguirlo. Además, la presentación de la nueva propiedad ha sido muy simbólica. Con la presencia de un histórico como Ramón Martínez y del abonado número 1, Juan Antonio Añíbarro, Solares compartió que este se trata de «un proyecto de vida» en el que los co-propietarios se asentarán en Valladolid para «estar de verdad muy compenetrados con la ciudad, conocerla, saber qué siente la gente, qué gusta y qué no gusta, de qué se habla, es fundamental tener presencia intensiva en la ciudad». «El objetivo de los próximos doce meses es el ascenso. Pero el ascenso no es el fin. El fin que perseguimos es estabilizar al Real Valladolid durante muchos años en Primera División» continuó Solares, quien recordó que «20 años atrás estábamos en los primeros diez u once puestos de la clasificación histórica de Primera, si ponemos el corte en los últimos 20 años, nos situamos en el puesto 19 o 20. Pensamos estar aquí mucho tiempo, seguiremos en este proyecto los años que sean necesarios para devolver a la institución a Primera».

Mensaje de bienvenida a la afición blanquivioleta

Los co-propietarios son conscientes que «los tiempos son apretados» por lo que «nuestra prioridad ahora es lo deportivo», subrayó Uruñuela; un área en el que trabaja desde ya Víctor Oltra, quien regresa 20 años después a la institución. Sobre los cambios en la estructura institucional blanquivioleta, los nuevos dueños del Pucela añadieron que «todo está en análisis en este momento, hay una estructura de costos y gasto y hay que ver el rendimiento que genera», y aclaró que «no nos hemos encontrado con ninguna sorpresa ni nada de lo que nos enteremos hoy». Uruñuela explicó que «no venimos con un equipo grande desde México, habrá cambios y es natural, hemos encontrado aquí un equipo muy profesional, comprometido con su trabajo, y la bienvenida ha sido muy buena por parte de todos los trabajadores». Solares y Uruñuela también estuvieron acompañados de Luis García, quien asumirá la vicepresidencia ejecutiva, agradecieron el «recibimiento sumamente caluroso» de los vallisoletanos, entre quienes han visto «ilusiones renovadas, cada persona que nos identifica en la calle nos da una muestra de ánimo y no saben la alegría que eso genera cuando llegas a un lugar que desde ahora será tu casa».

Por último, los nuevos dueños del Real Valladolid tuvieron un mensaje para la afición a la que únicamente la pidieron «un voto de confianza, la campaña de abonados está muy próxima a salir y los resultados deportivos son muy recientes, pero haremos todo de nuestra parte para recuperar esa confianza, entendemos que la relación hoy es compleja, los aficionados han cumplido con creces y ahora toca al Real Valladolid devolver todo eso a su afición. Hay más de 29.000 personas deseosas de tener un abono, vamos a darles excusas».