Los contribuyentes de Valladolid se ahorrarán este año más de 27 millones en la declaración de la Renta

La campaña de la declaración de la renta de Castilla y León estará marcada este año por la fiscalidad más baja de la historia para compensar la pérdida de poder adquisitivo de familias, autónomos y empresas ante la subida de la cesta de la compra, de la factura energética y de los tipos de interés. Así lo ha destacado hoy, en Salamanca, el presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, quien ha informado que, con 20 deducciones y con distintas rebajas en los tramos del IRPF, la Junta de Castilla y León va a permitir un ahorro de casi 120 millones de euros a los contribuyentes de Castilla y León. El Gobierno de Castilla y León, según ha añadido, es «útil» a las personas y «cumple» con sus compromisos como la bajada de impuestos prometida.

En primer lugar, respecto a las deducciones, Fernández Mañueco ha explicado que se incrementa tanto el número como el importe, y supondrán un ahorro de 40 millones de euros. Están dirigidas a apoyar a las familias, especialmente a los jóvenes y al mundo rural, con la natalidad, el cuidado de los niños, la vivienda, la movilidad y la discapacidad; y también a apoyar a las empresas en la innovación y en el emprendimiento. Ha citado varios ejemplos para visualizar en casos prácticos qué suponen estas deducciones fiscales. Así pues, ha explicado que una familia en Castilla y León cuyo hijo acuda a una guardería podrá deducirse 1.320 euros, y hasta 2.640 euros con declaración individual. «En otras comunidades, como mucho 300 euros. O un joven menor de 36 años que hubiera pagado 2.400 euros por el alquiler de su vivienda habitual en el medio rural, podrá deducirse 600 euros, frente a los 300 euros de otras autonomías, o nada en muchas de ellas», aseguraba.

En segundo lugar, además de las deducciones, la Junta de Castilla y León aplica rebajas de tipos en tres de los cinco tramos de la tarifa autonómica. En concreto, una nueva bajada del 5’3% en el primer tramo de la tarifa, pasando del 9’5% al 9%, con efectos sobre la totalidad de los contribuyentes. Esto sitúa a Castilla y León como la segunda Comunidad de España con el tipo mínimo más bajo. El conjunto de rebajas de tipos, la nueva y las aplicadas ya en años anteriores, va a permitir un ahorro adicional de 72 millones de euros. Y en tercer lugar, la Junta destina otros 7 millones de euros adicionales a compensar las deducciones familiares no aplicadas en el IRPF de años anteriores.

Son, en total, 120 millones de ahorro que van a ayudar a compensar la pérdida de poder adquisitivo de familias, empresas y autónomos, ha insistido el presidente, quien ha argumentado que «así se incentiva la inversión, el ahorro y el consumo, y se impulsa la recuperación económica». Además, sitúa a Castilla y León como la Comunidad con las ventajas fiscales «más favorables» para la natalidad y la protección de la familia; entre las tres primeras con una fiscalidad más favorable para el medio rural y en la cuarta posición en Índice Autonómico de Competitividad Fiscal.

Por otra parte, el presidente autonómico ha informado que la Junta de Castilla y León colaborará un año más con la Agencia Tributaria para facilitar a los contribuyentes de la Comunidad la confección de las declaraciones del IRPF, en especial a las personas mayores y beneficiarios de deducciones autonómicas. Para ello, la Consejería de Economía y Hacienda contará con 43 técnicos que prestarán este servicio de forma itinerante en 81 municipios del medio rural de la Comunidad. El servicio que presta la Junta consiste en la elaboración de declaraciones a través del sistema Renta Web; en la atención de todo tipo de consultas formuladas por los contribuyentes relativas a los distintos tipos de declaraciones de renta; y en informar de las deducciones autonómicas propias de Castilla y León.