Lo que dejó el 0-4 ante el Sevilla: Cocca avergonzado, Luis Pérez encendiendo aún más a su afición y un Zorrilla que se vacía

Un disgusto tras otro. Este es el bucle constante que vive el Real Valladolid esta temporada. Nadie se imaginaba que el esperado regreso a Primera División fuese a tener este amargo recibimiento. Colistas, con 15 puntos, encadenando ya cinco derrotas consecutivas, y con un proyecto deportivo que va camino, si no lo está ya, de ser un absoluto desastre. Ni con Pezzolano ni ahora con Cocca. El Pucela está ya al borde del abismo y tristemente esta pesadilla puede ser aún más terrorífica. En el vestuario blanquivioleta, cuerpo técnico y jugadores, reconocieron tras la derrota por 0-4 ante el Sevilla que fue una tarde para olvidar. Dos de los equipos que más goles han recibido esta temporada se veían frente a frente, y el Real Valladolid como último clasificado, hizo valer su condición de colista protagonizando un vergonzoso encuentro.

Un partido que más allá del póker de goles que encajó la portería de Hein dejó otras noticias a destacar. Entre ellas, una afición harta pidiendo constantemente la dimisión de la directiva, un José Zorrilla -que a pesar de la magnífica entrada con 22.123 espectadores-, se iba vaciando según llegaban los goles sevillistas y un ambiente enrarecido en el vestuario con un Luis Pérez que volvió a ser el foco de la diana. La afición pucelana no perdonó al lateral derecho sus desacertadas declaraciones tras el partido en Vallecas, y el «Mululu vete ya» se repetía desde las gradas del feudo pucelano durante el encuentro. El propio Luis Pérez reaccionó a modo de burla ante los cánticos de los seguidores blanquivioletas con aplausos irónicos lo que encendió aún más el ambiente en Zorrilla, recordando aquella triste temporada del descenso de 2010 con los Pelé, Medunjanin y compañía que se cargaron la buena sintonía que existía en aquel equipo de Mendilibar.

Y si fuera poco, hasta el propio ministro Óscar Puente no dudó en reaccionar a la derrota blanquivioleta con un duro mensaje en sus redes sociales. «No he visto a un Real Valladolid más inoperante, con menos calidad, menos autoestima, menos carácter, más desorientado y más perdido en mis 56 años de vida. Si ha habido un equipo peor que este, yo no lo he conocido. O no lo recuerdo», expresaba el exalcalde de Valladolid en su perfil de X. Y después de encajar un gol tras otro, ver como la salvación ya parece un sueño de esos de Resines, tocaba escuchar a los protagonistas en sala de prensa. En primer lugar, el míster Diego Cocca reconoció que no hubo excusas por la dura derrota frente al Sevilla y reconoció que mentalmente en el vestuario están «dolidos». «A la gente decirle perdón y gracias. Me siento avergonzado deportivamente por lo mostrado dentro de la cancha. Tratamos de que el equipo tenga un orden y un plan de juego, pero con un 0-4 no hay excusas«, reconoció.

El míster pucelano confesó que lo que le pasa al Real Valladolid son «muchas cosas» y que en las últimas semanas ha habido «muchos cambios»: «Hemos traído jugadores nuevos, hay otros que se lesionan, que piden el cambio, otros que no están… Mentalmente estamos dolidos. A la hora de competir no estamos a la altura». Además, Diego Cocca analizó que «el equipo le pone voluntad por momentos y cuando queda malparado el rival te lastima». «Lo difícil es que hicimos un gran partido contra el Betis y ese era el camino. Hay algo mental que seguramente no deje al equipo seguir creciendo», lamentó. Pese al duro momento que atraviesa el Club, el míster pucelano remarcó tras el encuentro que tienen «un compromiso de seguir y darlo todo para revertir esta situación». «Vine con mucha voluntad y ganas de adaptarme. No estamos reflejando el día de partido todo lo bueno que hacemos durante la semana», concluyó Cocca.

Por su parte, Anuar Tuhami -que nuevamente fue el jugador que salió a dar la cara por el resto de sus compañeros-, admitió que fue «un día durísimo». El canterano y uno de los capitanes del equipo reconoció que no dieron «la cara» ni «dignificaron la camiseta» ante el Sevilla. «Entiendo que la gente se vaya del campo, es normal que salga esa reacción viendo a su equipo así», aseveró. El jugador ceutí se mostró dolido por todo lo sufrido: «Estoy muy triste por la situación que estamos viviendo. Ver al Real Valladolid abajo en la tabla y con la imagen de este último partido. Me duele en el corazón con lo que nos ha costado volver a Primera División. Deberíamos hacer muchísimo más». «Si estamos ahí abajo es por nosotros. No estamos dando la cara. Todos podemos hacer las cosas un poco mejor. Hay que mirar al futuro y construir entre todos un mejor Real Valladolid«, sentenció el ’23’.