El hundimiento de la cúpula de la Iglesia de la Vera Cruz ha sido, tristemente, la gran noticia destacada de esta última semana en Valladolid. El pasado martes 25 de junio, durante las labores de rehabilitación que se estaban llevando a cabo en el templo vallisoletano, se produjo el derrumbe «a plomo» de la cúpula y la linterna desde 24 metros de altura, sin que afortunadamente hubiera que lamentar heridos ya que en el momento de los hechos un total de seis trabajadores se encontraban en el lugar. Nadie niega la catástrofe patrimonial por el colapso de la cúpula y el sentimiento de tristeza por ver este emblemático entorno de la calle Platerías con una imagen desoladora. Las tallas de la Vera Cruz tampoco sufrieron ningún desperfecto, más allá del polvo que se generó en la iglesia, y ahora tras los trabajos de desescombro permanecerán de manera temporal en un taller en la Catedral hasta que sean trasladadas algunas de ellas a la Iglesia de San Miguel y San Julián, mientras que otras permanecerán en la Catedral hasta que regresen de nuevo a su lugar habitual en la Vera Cruz.
Siguiendo con el repaso a la semana, el rescate de los dos espeleólogos de Castilla y León en Cantabria terminó con final feliz. Tras más de 40 horas bajo tierra, la vallisoletana Paloma Bombín y su novio Alfonso Urrutia fueron localizados sanos y salvos por el operativo de rescate que se desplegó en la cueva Garmaciega Sima el Sombrero, y tras indicarles el regreso, pudieron salir al exterior por sus propios medios. «Nos perdimos y no fuimos capaces de encontrar la vuelta», confesó el espeleólogo salmantino una vez ya en la superficie, quien aseguró que no tuvieron «ninguna angustia» ya que estaban provenidos de comida y agua, y esperaron a que les «vinieran a buscar». También hay que destacar la celebración del Debate de Política General en las Cortes de Castilla y León donde los líderes políticos autonómicos hicieron balance de la situación actual de la Comunidad. En este marco, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, anunció una nueva rebaja del IRPF, dos grandes pactos sociales y una estrategia de salud mental, y remarcó que «somos un gobierno útil y eficaz, que hace que Castilla y León funcione».
Por otro lado, esta semana también ha estado marcada por la intensa tormenta que azotó a la capital de Valladolid y algunos puntos de la provincia en la noche del pasado viernes. Las fuertes lluvias arrojaron 371 descargas eléctricas, una precipitación total de 30,2 litros por metro cuadrado. Además, el 112 recibió más de un centenar de avisos y 48 intervenciones en la capital por inundaciones, obstáculos en la calzada y rescates, como el que se produjo en el túnel de San Isidro después de que una joven se quedara atrapada en su vehículo y no pudiera salir al estar rodeada de agua. Ya por último, el top-5 informativo de la semana, el sabotaje que sufrió Cepa 21 el pasado mes de febrero fue resuelto. La Guardia Civil detuvo a una extrabajadora de la bodega vallisoletana por su presunta vinculación con este boicot en el que se derramaron un total de 60.000 litros de vinos de exquisita calidad, valorados en más de 2,5 millones de euros. La mujer fue despedida dos días antes de los hechos y también se investigó a su pareja, aunque finalmente se descartó su implicación en los hechos.