Valladolid, como en otras tantas ciudades de España, la Noche de Halloween ha sido sinónimo de disfraces, terror y también de fiesta. Precisamente, la Policía Municipal activó un Servicio Especial de Prevención de Consumo de Alcohol con motivo de Halloween con un amplio despliegue de patrullas por la calle y ha dejado casi un centenar de denuncias por beber alcohol en la vía pública, la mayoría de ellas, a grupos de jóvenes en las zonas aledañas al río Pisuerga, entre Las Moreras y La Rosaleda. En concreto, han sido cinco actas a menores por consumo de bebidas alcohólicas en la calle y 96 denuncias.
Además, durante las labores de prevención, control y vigilancia de los agentes de la Policía Municipal de Valladolid también se tuvieron que coordinar el trasladado de dos mujeres, menores de edad, por encontrarse en estado ebrio. Asimismo, según han indicado los efectivos policiales durante el Servicio Especial de Halloween que se activó sobre todo en las zonas de Moreras, la Rosaleda, Poniente y Curtidores también se requisaron una pistola de bolas, una defensa extensible, un rotulador de grafitis y casi medio centenar de botellas de alcohol. A pesar de estas intervenciones principalmente motivadas por la presencia de jóvenes bebiendo en la vía pública, la Noche de Halloween transcurrió, afortunadamente, sin altercados ni incidentes graves por lo que a pesar de ser la noche más terrorífica del año, fue tranquila en la capital vallisoletana. Con motivo del fin de semana festivo en Valladolid, la Policía Municipal ha advertido a los jóvenes de que no deben abusar del alcohol, ni tampoco conducir bajo sus efectos ni en estado de embriaguez. «En Halloween puedes disfrazarte y salir de fiesta» recomiendan los agentes.