El vicepresidente de la Diputación de Valladolid, Víctor Alonso, y la presidenta de la CEOE Valladolid, Ángela de Miguel, han participado este viernes en un encuentro empresarial enmarcado en el proyecto de Economía Circular que desarrollan ambas entidades, con el objetivo de impulsar el desarrollo sostenible en la provincia de Valladolid. El vicepresidente provincial destacado que la Diputación de Valladolid es consciente de la grave situación que están atravesando las familias, empresas y ayuntamientos de nuestra provincia ante la imparable escalada de los precios de la energía.
«Y por ello, la institución ha puesto en marcha distintas medidas como son el Plan Extraordinario para la financiación de gastos corrientes energéticos, dotado con 3 millones de euros, destinado a ayudar a los ayuntamientos de la provincia, el Bono para reactivar el Comercio, la Hostelería y el Turismo en la provincia o el Bono-Transporte para profesionales del sector transporte», destacó Víctor Alonso. Asimismo, desde hace varios años la Diputación ha mantenido una línea de ayudas para mejorar la eficiencia energética en alumbrado público y dependencias municipales de los ayuntamientos de nuestra provincia y a partir de abril de 2023 la comunidad energética Toda Valladolid permitirá a ayuntamientos rurales, negocios y particulares ahorros de luz de entre el 25% y el 30%, gracias a la constitución de una red de generación de energía solar. Junto a estas medidas, la Diputación de Valladolid reivindica medidas de otras administraciones, como el Gobierno de España, que «ayuden a aliviar a particulares, empresas y administraciones la difícil situación energética actual».
Por su parte, la presidenta de CEOE Valladolid, Ángela de Miguel, puso de manifiesto los riesgos que existen en el momento actual para nuestra economía, derivados de la inflación, el encarecimiento de las materias primas y el elevado coste de la energía que se viene arrastrando durante los últimos meses. En este sentido, destacó la «preocupación máxima» del tejido productivo vallisoletano y la necesidad urgente de que desde el Gobierno central se impulsen políticas que supongan un apoyo efectivo a las empresas, con fundamental foco en las industrias electrointensivas. Asimismo, consideró «fundamental» que estas políticas se diseñen en diálogo con los sectores afectados y haciendo uso, al máximo, de toda la flexibilidad que en otros países europeos están aplicando en este contexto de crisis.
De Miguel destacó que, ante la situación de incertidumbre actual, el nuevo modelo de producción y consumo que ofrece el Desarrollo Sostenible, «va a generar múltiples oportunidades de negocio, pero para ello se requieren profesionales con nuevas capacidades, competencias y conocimientos. Su impacto en el empleo es ya una realidad». La economía circular plantea un «modelo de consumo alternativo» que crea oportunidades de empleo y requiere de perfiles con competencias y capacidades muy específicas, lo que se constituye en una oportunidad de desarrollo y crecimiento económico que es determinante explorar en estos momentos de incertidumbre económica. Para ello, adaptar la formación a las nuevas necesidades de las empresas en la selección del personal y facilitar los procesos formativos en el ámbito de la propia empresa es prioritario cuando la implantación de estos modelos de gestión económica no puede desarrollarse sin personal capacitado para ello.
Con la intención de fomentar entre las empresas de nuestra provincia la adaptación de sus modelos de gestión y producción tradicionales hacia otros más sostenibles, ambientalmente más responsables y económicamente más rentables. CEOE Valladolid y la Diputación Provincial, han puesto en marcha un proyecto para acercar la economía circular a las pymes de la provincia. Tiene dos objetivos principales como fomentar la sostenibilidad en las empresas para optimizar recursos y reducir costes y emisiones, y elaborar de un mapa que identifique cuales son las principales materias primas que utilizan las empresas participantes y cuáles son los residuos reutilizables como materia prima para potenciar la creación de nuevas empresas o las sinergias entre ellas.
Para ello, se cuenta con expertos en distintas áreas de la economía circular y de la sostenibilidad que, en talleres eminentemente prácticos que se desarrollan en distintos municipios de la provincia, explican a las empresas cómo desarrollar procesos más sostenibles y más rentables. Además de los talleres, se pone a disposición de los participantes 2 horas de consultoría personalizada que les permite hacer un análisis de la situación de su empresa en materia de consumo energético, uso de materias primas, generación, recogida y gestión de residuos, y colaboración entre empresas.
