Inundaciones o daños en cultivos: piden declarar zona catastrófica a cinco municipios de Valladolid por las tormentas de principios de julio

El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León celebrado este jueves 17 de julio ha acordado la solicitud al Gobierno de España de la declaración de Zona Gravemente Afectada por una emergencia de Protección Civil a la provincia de Valladolid por las tormentas de lluvia y granizo de los días 4 y 5 de julio de 2025. En concreto, el pasado viernes 4 de julio, la Agencia de Protección Civil y Emergencias de la Junta emitía el aviso de nivel naranja ante el riesgo por lluvias y tormentas en la provincia vallisoletana, según la información recibida de la AEMET y a última hora de ese día, el empeoramiento de las condiciones meteorológicas determinó que la Delegación Territorial de la Junta en Valladolid declarara el Plan Territorial de Protección Civil de Castilla y León para la provincia en situación 2, constituyéndose el CECOPI.

El PLANCAL se mantuvo activado hasta las 10.26 horas del día 6 de julio, al haberse normalizado la situación en las zonas afectadas por las tormentas. En ese corto periodo de tiempo, las intensas precipitaciones de lluvia y granizo provocaron inundaciones que derivaron en importantes daños materiales y motivaron el rescate de dos personas atrapadas en sus vehículos que se vieron sorprendidas por una balsa de agua. Los municipios vallisoletanos más afectados por estas tormentas de principios de julio fueron Medina del Campo, Villanubla, Rueda, Bocos de Duero y Peñafiel. Además, se registraron hasta 76 incidentes de distinta consideración relacionados con este episodio de meteorología adversa. Por los hechos descritos, concurre en la provincia de Valladolid la circunstancia de catástrofe definida en Ley 17/2015 del Sistema Nacional de Protección Civil, como una situación o acontecimiento que altera o interrumpe sustancialmente el funcionamiento de una comunidad o sociedad por ocasionar daños e impactos materiales cuya atención supera los medios disponibles de la propia Comunidad.

Esta ley prevé que cuando se produzca una emergencia cuya magnitud requiera para su recuperación la intervención de la Administración General del Estado, se aplicarán medidas de prevención para reducir los riesgos, tales como estudios de riesgo, obras preventivas, sistemas de alerta, programas de formación y concienciación, o la posibilidad de medidas preventivas a particulares si está justificado, entre otras actuaciones y todo ello previa declaración de la emergencia. Por ello, la Junta solicita al Gobierno de España la declaración de zona afectada gravemente por una emergencia de protección civil para la provincia de Valladolid afectada por las tormentas de lluvia y granizo de los días 4 y 5 de julio que ocasionaron los daños que se registraron en cinco municipios de Valladolid. Algunos de los daños que se registraron esos días en Medina del Campo fue la caída del techo del Polideportivo Barrientos, la inundación del piso inferior de una residencia de ancianos, voladura de cubiertas y paneles solares en el colegio San José, averías en la red de saneamiento y abastecimiento, levantamiento del asfalto en diferentes zonas de la localidad, daños en cultivos o inundaciones en locales comerciales, garajes, sótanos, portales y plantas bajas de viviendas.

Por otro lado, en Villanubla, las precipitaciones en forma de lluvia y granizo acompañadas de tormentas provocaron principalmente inundaciones en locales comerciales, garajes, sótanos, portales y plantas bajas de viviendas. Mientras que en Rueda resultaron afectadas 1.500 hectáreas de cultivo, de las cuales 500 solo de viñedos, la Ermita del Cristo y también inundaciones en locales comerciales, garajes, sótanos, portales y plantas bajas de viviendas. Por último, las inundaciones en establecimientos, aparcamientos y viviendas también se registraron en las localidades de Bocos de Duero y Peñafiel, junto a daños en caminos rurales.