Jornada agitada en la celebración de la comisión de seguimiento de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad con el ya habitual debate entre integración o soterramiento. A dicha reunión ha asistido el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, pero no el alcalde de la ciudad, Jesús Julio Carnero, lo que ha provocado la reacción del ministro vallisoletano cargando por la actitud del regidor con la operación ferroviaria de Valladolid. Precisamente, Puente ha puesto sobre la mesa los «incumplimientos» por parte del Ayuntamiento en el convenio de integración ferroviaria firmado en 2017 refiriéndose al «nulo compromiso» del alcalde con la integración ferroviaria y con el soterramiento.
En primer lugar, el ministro de Transportes ha mostrado su «absoluto estupor» por la ausencia del alcalde de Valladolid a una convocatoria que precisamente la solicitaba el Ayuntamiento de Valladolid. «Esto pone de manifiesto el doble lenguaje, el doble discurso y el nulo compromiso del alcalde con la operación de integración ferroviaria y con la operación del soterramiento, que por un lado vende a los ciudadanos con mucha intensidad, pero cuando llega la hora de sentarse en la mesa a tomar decisiones ante los órganos competentes, para ello pues no acude. Sin que su agenda justifique esta ausencia», ha señalado esta mañana Puente. En este sentido, el ministro ha querido remarcar que él sí que ha asistido a esta reunión, «como por cierto yo hacía en todas las reuniones que se convocaban cuando era el alcalde de Valladolid, y hoy lo hago como ministro porque me parece muy importante tanto para el Ministerio como para la ciudad de la que un día fui alcalde».
En segundo lugar, Óscar Puente ha anunciado que en esta comisión, Adif ha requerido al Ayuntamiento de Valladolid y a la Junta de Castilla y León, de acuerdo con la legislación vigente, «para que en el plazo de un mes den cumplimiento a todos los requerimientos que se le han formulado y la entrega de los proyectos». En esta línea, Puente se ha referido que el Consistorio vallisoletano no ha entregado a la SVAV los tres proyectos de Ariza, la ampliación y mejora del paso peatonal de San Isidro, el cumplimiento de aportar la titularidad de los suelos donde se asientan los nuevos talleres o el proyectos de las obras de reurbanización de la calle Salud, «denominada por los vecinos como la acera de la vergüenza». Tal y como ha detallado Óscar Puente, las consecuencias del incumplimiento serán la «inmediata» resolución del convenio de integración suscrito en el año 2017 y el inicio de las operaciones de liquidación de la SVAV. «El Ministerio no está dispuesto a que jueguen con él, el alcalde de Valladolid puede jugar con la ciudad, con sus vecinos, que me duele, pero desde luego con quien no va a seguir jugando es con el Ministerio de Transportes«, subrayó Puente.
«Las relaciones entre las instituciones se rigen por los principios de buena fe y lealtad, y más cuando lo que hay por medio es un convenio que se tardó mas de dos años en firmar, y suscrito por las tres administraciones. Ese convenio hoy no se está respetando ni cumpliendo. El Ayuntamiento tiene una clara actitud obstruccionista para no cumplir con el convenio, y por tanto, el Ministerio no puede seguir soportando los constantes incumplimientos», se mostró rotundo Puente. Asimismo, el que fuera alcalde de Valladolid durante 8 años, ha vuelto a insistir en que la conclusión de esta situación es que «el señor Carnero aboga a la ciudad a la nada, porque el soterramiento no se va producir puesto que ya hemos dejado claras las reacciones técnicas y económicas que lo hacen inviable y la única posibilidad es que se continúe con la integración, que se demuela el Arco de Ladrillo y se sustituya por un paso digno a la altura del siglo XXI; que se mejore la conectividad en la calle Irún y se hagan pasos nuevos».
A este respecto, Óscar Puente ha señalado que «estábamos dispuestos a modificar el convenio incluyendo otros pasos, pero la realidad es que no va a haber nada. No lo va a haber por el deseo de un responsable político y su profunda desconsideración«. Por último, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible ha recalcado que con este requerimiento, las administraciones a nivel local y autonómico tienen que tomar las decisiones que consideren oportunas para que en un plazo de mes, si se mantienen los incumplimientos, se disolverá la Sociedad Valladolid Alta Velocidad.
El Ayuntamiento de Valladolid entiende el requerimiento como una «amenaza» de Óscar Puente
El concejal de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Valladolid, José Ignacio Zarandona, fue quien asistió a la Comisión de Seguimiento de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad este jueves, y reconoció que el ministro de Transportes «había puesto sobre la mesa un requerimiento» para que se lleven a cabo diversos trámites y de lo contrario, en un plazo de un mes, se disolvería la sociedad con el correspondiente convenio de la integración ferroviaria firmado en el año 2017. Al término de la reunión, Ignacio Zarandona expresó que «ha sido una sorpresa», puesto que «ha sido una reunión inconcebible, tomando posesión los nuevos miembros, resulta que apareció el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible con unas intenciones muy marcadas, las que todos conocemos, que son las de amenazar y poner encima de la mesa un requerimiento para que la Sociedad Valladolid Alta Velocidad se disuelva».
En este sentido, el concejal de Urbanismo ha señalado que el ministro dice que en el Ayuntamiento «incumplimos» el convenio de integración ferroviaria, pero le ha contradicho manifestando que «no es así» ya que ha desmentido «punto por punto». «Nosotros como Ayuntamiento, a fecha de hoy, estamos cumpliendo todos los compromisos que tenemos adquiridos con la Sociedad Valladolid Alta Velocidad. Luego eso es mentira, por ahí no hay caso», ha indicado. Además, ha explicado que ha pedido un diálogo, «que permita, dadas las circunstancias en las que nos encontramos en 2024, son distintas de las del 2017, abrir un turno para estudiar una alternativa, nada más», ha remarcado Zarandona, al tiempo que ha insistido en que se «estudie el informe que encargó el Ayuntamiento para ver la posibilidad real, costes y tiempos del soterramiento, y su comparación con la integración en superficie que ahora está vigente».
Zarandona entiende que el Ministerio no quiere ese diálogo y que no va a «variar». «No tienen ninguna intención de modificar el convenio actual», ha enfatizado el edil, mientras recriminaba que «no va a haber diálogo». Por último, el concejal de Urbanismo ha señalado que el equipo de Gobierno buscará «la manera de seguir trabajando» y ha apuntado a todos los vallisoletanos que deben «entender» que será necesario «luchar». «Tendremos que estar cada vez más convencidos de que este propósito es posible, porque lo es, y que simplemente la cerrazón de un ministro y su falta de diálogo es el que nos quiere poner contra las cuerdas», ha concluido.