La Policía Nacional ha detenido en Valladolid a una mujer como presunta autora de un delito de atentado a agente de la autoridad. Todo sucedió en la madrugada del domingo 14 de septiembre, a las 03.30 horas, cuando los agentes de la Policía Nacional adscritos al servicio de Seguridad Ciudadana fueron comisionados por la Sala CIMACC 091 a un establecimiento hostelero ubicado en el barrio vallisoletano de Parquesol, tras recibirse una llamada alertando de la presencia de una mujer alterando el orden en el interior de un bar. A su llegada, los efectivos localizaron a la mujer en cuestión en la vía pública, en actitud agresiva y profiriendo gritos e insultos hacia varios ciudadanos.
Al intentar calmar la situación, los agentes fueron también objeto de insultos por parte de la mujer, quien alegaba haber sido expulsada del local por dos varones presentes en el interior. Durante la intervención, uno de los agentes procedió a identificar a los implicados en el interior del establecimiento. Uno de ellos manifestó haber recibido una agresión física con un golpe en el rostro por parte de la mujer, mientras otro indicó que la misma había estado molestando e insultando a los clientes, lo que motivó su expulsión del local. La mujer se negó reiteradamente a identificarse, profiriendo nuevamente amenazas e insultos hacia los agentes. Finalmente, entregó su documentación de forma desafiante. Mientras se procedía a tomar sus datos, la mujer agredió físicamente a uno de los agentes, propinándole varios puñetazos en el abdomen y amenazando verbalmente con causarles daño. Ante estos hechos, los agentes procedieron a su detención inmediata, mostrando la detenida una actitud violenta, negándose a colaborar, despojándose de parte de su ropa en plena vía pública y siendo trasladada posteriormente al Centro Médico Arturo Eyries para valoración médica.
Una vez en el centro sanitario, la detenida continuó con su comportamiento hostil, negándose a descender del vehículo policial. Fue necesario el uso de una silla de ruedas para su traslado, momento en el que volvió a agredir a uno de los agentes, mordiéndole en la muñeca y antebrazo derecho. Tras recibir asistencia médica, la detenida fue trasladada a dependencias policiales para la instrucción de las diligencias correspondientes. Finalmente, la detenida fue puesta a disposición judicial decretando la autoridad su libertad.

