Si hay una fiesta en la provincia de Valladolid, donde la imagen vale más que mil palabras, esa es El Vítor de Mayorga. La localidad terracampina resurge cada 27 de septiembre su sentimiento más puro y sentido hacia su historia con su procesión dedicada al Vítor, en la que los mayorganos salen a las calles portando pellejos de vino ardiendo. La Fiesta del Fuego de Mayorga es única y peculiar no solo por sus espectaculares escenas de llamas por las calles de la villa, sino por su fuerte olor y huella de la pez quemada, que es precisamente, el mayor de los recuerdos que se tiene cada año de esta noche histórica. Este año, Mayorga contó además de la presencia de miles de vecinos y visitantes con el presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, que volvió a vivir en primera persona esta experiencia única en nuestra provincia, acompañado por el alcalde de Mayorga, David de la Viuda.
La Fiesta de El Vítor se remonta a 1752 cuando el municipio de Mayorga recibió la segunda reliquia de su patrón Santo Toribio de Mogrovejo y Robledo y todos los vecinos salieron a recoger el estandarte con antorchas improvisadas para iluminar el camino. Fue tal la devoción que en aquellos remotos tiempos se transmitió hacia la figura del mayor de sus ilustres vecinos a través de la reliquia que se quedó para la prosperidad y hoy esta tradición ancestral perdura en nuestros tiempos. Sin duda una fiesta que llama la atención tanto de pequeños como mayores. La procesión de El Vítor, declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional, volvió a dejar una noche para el recuerdo en letras doradas en la historia de Mayorga, donde ni el frío pudo con las ganas de honrar su tradición. Aquí puedes disfrutar de una recopilación de fotografías de la Fiesta de El Vítor de Mayorga 2024.