El escritor y periodista Fernando Sánchez Dragó ha muerto este lunes a los 86 años en Soria a causa de un paro cardiaco. Recientemente ha sido destacado por su papel en la moción de censura de Vox, junto a Ramón Tamames y fue reconocido con el Premio Castilla y León de las Letras 2022. Sánchez Dragó militó en el Partido Comunista junto a Tamames y llegó a estar encarcelado durante el franquismo, pero su ideología ha variado en las últimas décadas.
Previamente, fue autor de casi un centenar de libros, entre ellos novelas y ensayos. También fue muy conocido como presentador de programas de televisión, muchos de ellos relacionados con la política. Sánchez Dragó publicó infinidad de títulos como ‘El camino del corazón’ o ‘Muertes paralelas’, que le dieron galardones como el Premio Nacional de Ensayo y el Premio Planeta.
En su vinculación con Castilla y León, el pasado mes de febrero Fernando Sánchez Dragó fue reconocido con el Premio de las Letras 2022 «por la amplitud y la solidez de su obra, torrencial, apasionada e inquieta, y siempre entreverada de elementos autobiográficos y visionarios, a la vez que fiel memoria de toda una generación y una época», exponía el jurado del certamen.
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, también ha lamentado su muerte y ha dado públicamente las condolencias a la familia del escritor. «Apenado por el repentino fallecimiento de Fernando Sánchez Dragó, nuestro Premio Castilla y León de las Letras 2022. Lamento profundamente la pérdida de un gran escritor y soriano de adopción. Un abrazo y todo mi cariño a su familia, amigos y al mundo de las letras», rezaba en su cuenta de Twitter.
La repentina muerte de Fernando Sánchez Dragó ha inundado las redes sociales de mensajes de condolencias por parte de sus seguidores. Precisamente, el propio escritor publicaba en la mañana de este mismo lunes, a las 09.46 horas, una fotografía junto a su gato. «El gato Nano me da los buenos días. Él sabe que en la cabeza está el secreto de casi todo», compartía Sánchez Dragó en Twitter minutos antes de sufrir el trágico infarto. El Servicio de Emergencias del 112 de Castilla y León recibían el aviso tan solo 11 minutos después de su publicación en redes sociales y enviaron una ambulancia y un helicóptero hasta la residencia del escritor, aunque desgraciadamente no se pudo hacer nada por salvar su vida.
