El desaparecido Alejandro Aranda ha sido localizado sin vida en la mañana de este jueves en el río Pisuerga en Valladolid capital. Tras casi tres semanas sin noticias sobre el joven historiador, el peor de los desenlaces se ha confirmado en este jueves 10 de abril. Un amplio dispositivo de Policía Nacional y Bomberos se ha movilizado este mediodía en el entorno del Puente Juan de Austria ante la aparición de un cadáver flotando en el río Pisuerga. En un primer momento, los agentes no podían confirmar que el cuerpo hallado se tratara del guía turístico desaparecido el pasado 23 de marzo en Valladolid ya que presentaba un avanzado estado de descomposición.
Precisamente, el capitán del barco La Leyenda del Pisuerga ha sido quien vio en un primer momento el cuerpo sin vida de Alejandro Aranda Lasheras, e inmediatamente dio aviso a los Bomberos municipales sobre que había visto algo que le había llamado especialmente la atención en el margen izquierdo del río Pisuerga, a la altura del barrio vallisoletano de Cuatro de Marzo. Tras la notificación, los Bomberos del Ayuntamiento de Valladolid se dirigieron inmediatamente al lugar, contactando con el Grupo de Homicidios y Desaparecidos de la Policía Nacional que acudieron a la zona donde se estaba rescataba el cuerpo localizado. Tras poner en marcha el protocolo que estos casos exigen con la presencia de la Comisión Judicial compuesta por el Médico Forense, Secretario Judicial, Policía Científica y Policía Judicial se procedió al levantamiento del cadáver. Finalmente se ha podido identificar antropológicamente que el cadáver localizado junto al Puente Juan de Austria se trata de Alejandro Aranda Lasheras.
De esta manera, se pone punto y final a la desaparición del guía turístico del Imserso, Alejandro Aranda de 30 años y natural de la localidad de Alcalá de Moncayo, cuyo rastro se perdió el pasado domingo 23 de marzo junto al Hotel Olid junto a la Plaza de San Miguel. Alejandro visitaba por primera vez la ciudad del Pisuerga para participar en una excursión como guía turístico con un grupo de visitantes. El varón pudo sufrir un brote psicótico en la noche de ese mismo domingo en el citado hotel, lo que hizo que abandonara el alojamiento y desde entonces su pista se esfumó. En las últimas semanas, familiares, amigos y voluntarios han realizado diferentes batidas por la ciudad y provincia de Valladolid en busca de Alejandro para sumar esfuerzos en las labores de búsqueda que estaban llevando a cabo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La desaparición de Alejandro ha mantenido en vilo a los efectivos policiales hasta hoy ya que su rastro se perdió por completo en Valladolid el 23 de marzo, sin que hubiera una línea clara de investigación con todas las hipótesis abiertas.
Finalmente, la desaparición del joven historiador de Zaragoza ha terminado con el peor final posible tras localizar su cuerpo en el río Pisuerga. Será la autopsia la que revele las causas y el día de su muerte. La Policía Nacional ya ha dado aviso a los familiares de Alejandro Aranda Lasheras, quienes se desplazaron desde el mismo día de su desaparición de Zaragoza a Valladolid para seguir de cerca la investigación y el operativo policial.