La nueva temporada está a punto de arrancar para el Real Valladolid. Después de un año para olvidar en Primera, con las esperanzas e ilusiones renovadas, toca volver a creer en el novedoso proyecto blanquivioleta que termine a final de temporada con una Plaza Mayor abarrotada celebrando un nuevo ascenso. Por delante, ni más ni menos que la categoría de plata y la dificultad de sumar en cualquier campo. Un total de 22.280 kilómetros para reavivar la ilusión pucelana, para volver a engancharse a una pasión que nace y crece de dentro. Serán 21 ciudades para dirimir una LaLiga Hypermotion que llevará al Real Valladolid a lo largo de 11 comunidades autónomas, una ciudad autónoma e incluso otro país. A los aficionados blanquivioletas les toca desplegar el mapa para conocer los destinos de los chicos de Guillermo Almada en este curso que está a escasos días de arrancar.
Teniendo en cuenta la ruta más rápida por carretera, entre el Estadio José Zorrilla y cada uno de los campos a visitar, el GPS pone cifras a las distancias a cubrir. Los viajes más cortos son a Burgos con 130 kilómetros de ida y León con 137 kilómetros, derbis regionales en una Castilla y León que contará finalmente con cuatro equipos en esta temporada, con Miranda de Ebro a 208 kilómetros de distancias tras caer en la final del playoff de ascenso, y sin Ponferrada, que se quedó a las puertas de regresar desde 1ª RFEF. Por distancia, en la lista aparece después el único municipio madrileño, Leganés a 214 kilómetros. Y se emprende rumbo al norte para hacer parada en Santander y Gijón con 249 y 273 kilómetros respectivamente, en esa cornisa cantábrica tan bien conocida a la que se suma, con su ascenso, San Sebastián a 336 kilómetros de distancia; sin olvidar Éibar a 293, en la provincia guipuzcoana, otro de los desplazamientos cercanos para los vallisoletanos. También con ese influjo del océano Atlántico está A Coruña a 435 kilómetros de Pucela, una de las ciudades que hace más tiempo que no visita el Real Valladolid, en concreto desde la campaña 2012-2013 en LaLiga.
La mirada gira hacia el este para anticipar las siguientes paradas con Zaragoza a 424 kilómetros, siendo la más cercana en Aragón, donde también se juega en Huesca a 491 kilómetros, cerca de los Pirineos, en cuyo corazón se encuentra Andorra a 755 kilómetros tras su ascenso. Un viaje que camina al sur por el balcón Mediterráneo para detenerse en Castellón a 637 kilómetros de la capital vallisoletana, un desplazamiento que desde la temporada 2006-2007 no se producía. Seguidamente, en Andalucía, el Pucela viajará recorrerá 735 kilómetros para medirse al Almería, Granada 630, Málaga 734 y hasta llegar hasta Cádiz a 699 kilómetros, donde de nuevo se conecta con el Atlántico. El viaje por España continúa en la región más meridional ya que otra de las novedades de este curso 2025-2026, el Real Valladolid debe cruzar el estrecho de Gibraltar, algo que no sucede en Segunda desde la 1965-1966. Serán 888 kilómetros hasta Ceuta en un viaje por tierra y mar, el único de la temporada que implicará navegar, aunque no cruzar el mar, ya que el viaje en avión a Las Palmas de Gran Canaria supondrá un desplazamiento de 1.800 kilómetros.
Por último, de vuelta al interior de la península Ibérica, las dos últimas ciudades que recibirán la pasión de los aficionados blanquivioletas. En concreto a Albacete a 471 kilómetros y Córdoba a 599, completan un recorrido que abarca más de 22.280 kilómetros entre ida y vuelta, eso sí siempre en función de la rutas y el medio de transporte elegidos, para acompañar incondicionalmente al Pucela. En resumen, Andalucía y Castilla y León serán las regiones con más representación, cinco y tres respectivamente. Siguen Aragón y País Vasco con dos, mientras que con un equipo están la ciudad autónoma de Ceuta, Asturias, Islas Canarias, Cantabria, Madrid, Galicia, Comunidad Valenciana, Castilla La-Mancha y el Principado de Andorra. Un viaje apasionante por la geografía con el deseo de firmar muchas alegrías y puntos para los pupilos de Almada, y volver más pronto que tarde a Primera.