Fue un aparatoso y escandaloso accidente de tráfico en la tarde de este viernes en la localidad vallisoletana de Zaratán. El 112 de Castilla y León y la Guardia Civil recibían un aviso por una colisión de un camión contra una estación de servicio situada en la N-601, kilómetro 194, dentro del municipio de Zaratán. El camionero, que conducía un tráiler de grandes dimensiones, perdió el control empotrándose contra el lavadero de la gasolinera, tres turismos estacionados y llevándose por delante un muro de una nave industrial.
El siniestro, ocurrido alrededor de las 15.30 horas de este viernes 13 de diciembre, se saldó con cuantiosos daños materiales, pero no personales. El conductor del camión resultó ileso tras el choque, pero al someterse a las pruebas de alcoholemia por parte de la Guardia Civil, el accidente no fue fruto de un despiste ni de un descontrol del vehículo articulado, sino que circulaba ebrio superando las tasas de alcohol permitidas. Tal y como informan fuentes de la Subdelegación del Gobierno a Valladolid Plural, el camionero arrojó resultados de 0,88 y 0,83 mg/l tras la realización de las pruebas, por lo que sextuplicaba la tasa de alcohol permitida para conductores profesionales.
Pasada una hora, sobre las 16.35 horas, los agentes de la Guardia Civil procedieron a la detención del conductor del camión implicado, un ciudadano de nacionalidad polaca, por dos presuntos delitos contra la Seguridad Vial y conducción temeraria. En el choque también intervinieron los Bomberos de la Diputación de Valladolid que realizaron tareas de limpieza por el derrame de gasolina en las inmediaciones de la estación de servicio.