El Atlético Valladolid recupera sus constantes en Alicante y logra la primera victoria lejos de Huerta del Rey

El Balonmano Atlético Valladolid se llevó su primer triunfo de la temporada lejos de Huerta del Rey. Los de David Pisonero se sobrepusieron a la derrota del pasado fin de semana ante el Dicorpebal Logroño con una sólida actuación en ambos lados de la cancha, pero sobre todo recuperando la solvencia defensiva, con la portería respondiendo en los momentos decisivos. No se notaron las bajas de Alejandro Pisonero y de Fodorean, y de nuevo con una constante y efectiva rotación, el técnico David Pisonero sacó mucho partido de sus recursos alternando en la dirección a un Karapalevski con mayor protagonismo y a Pablo Herrero, cuya aportación fue decisiva para el desenlace positivo del choque.

La cita comenzó con ambos equipos tratando de imponer su defensa y corriendo tras recuperación. El marcador reflejaba la igualdad pero una serie de imprecisiones y los goles de Alicante al contraataque le dieron la primera ventaja a tener en cuenta 6-3 al minuto 9 con el central Torrico y el extremo Barreto especialmente acertados. Pero tras ese momento de dudas, el Balonmano Atlético Valladolid engrasó su defensa, Bar empezó a detener balones y los locales sólo anotaron un gol en 5 minutos, con lo que los vallisoletanos lograron ponerse por delante con el 8-9 a los 20 minutos del partido, tras el gol de Karapalevski que llevó con nota la manija de los suyos en este primer periodo. La escuadra pucelana con un trabajo muy serio en defensa y la seguridad de Bar bajo palos logró un 1-4 para ponerse tres por delante, parcial que remató Toledo sobre la bocina para irse con cuatro tantos de renta a vestuarios con el 11-15. Tras el descanso Alicante salió volcado para intentar la remontada, con una defensa que se tornaba en abierta con el paso de la posesión dificultó mucho la circulación visitante y llegó a tener balón para ponerse a uno.

El Balonmano Atlético Valladolid se deshizo inicialmente de la presión levantina, pero los de Fernando Latorre lo siguieron intentando y volvieron a acercarse con una intensidad enorme en cada jugada y esa defensa 3:3 que se atragantaba a los pupilos de Pisonero, que se quedaron en un sólo gol anotado en los primeros 10 minutos de este segundo tiempo. Con su empuje y el apoyo de su público, los jugadores alicantinos empataron a 16-16, resultado que rompió un fantástico gol de rosca de Pablo Herrero. Entonces el Balonmano Atlético Valladolid asumió el reto porque quería llevarse los dos puntos para Huerta del Rey, y fue ahí cuando mejoró la lectura de la ofensiva levantina y capeó el peligro. Sin embargo, Horneo Eón lo seguía intentando con el argentino Parker muy incisivo. El cuadro castellano se defendía como gato panza arriba incluso con un hombre menos por las exclusiones pero en la portería contraria Domenech daba a los suyos la ocasión de empatar de nuevo. Un paradón del capitán César Pérez sirvió de revulsivo al equipo pucelano, que conseguía una ventaja de tres goles de la mano de Jorge Serrano y la efectividad de Gedo en los 6 metros, poniendo el 19-22 al minuto 52.

En esta fase final del encuentro la dirección de Pablo Herrero fue fundamental. La presión en todo campo de los alicantinos no logró su objetivo ante la serenidad del Balonmano Atlético Valladolid que consiguió salir del trance rematando una victoria de gran valor, para la que recuperó su identidad defensiva y se sacó la espina de la pasada semana ante Dicorpebal Logroño, después de ganar en el Pabellón Pitiu Rochel de Alicante por un ajustado 25-27.