El colectivo de Ecologistas en Acción ha alzado la voz en contra de la Zona de Bajas Emisiones de Valladolid, que entrará en vigor el próximo 1 de julio, ya que apuntan a que es «fraudulenta», y ya han anunciado que recurrirán la misma ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. Asimismo, desde la organización ecologista también han lamentado que el Ayuntamiento de Valladolid la implante «con dos años y medio de retraso sobre el plazo legal y en un tercio de la superficie inicialmente prevista». En primer lugar, Ecologistas en Acción se aferra al estadio del Instituto de Salud Carlos III de Madrid y el Instituto de Salud Global de Barcelona, en el que se expone que «la contaminación atmosférica ocasiona en Valladolid más de 200 muertes cada año«. «Los contaminantes responsables de este grave problema sanitario son el dióxido de nitrógeno y las partículas, en invierno, y en verano el ozono, emitidos directa o indirectamente por el tráfico motorizado, principal responsable de la calidad del aire que respiramos en la ciudad», han apuntado desde la organización.
Para abordar este asunto, la Ley estatal de Cambio Climático estableció en 2021 que todas las ciudades mayores de 50.000 habitantes debían establecer Zonas de Bajas Emisiones antes de 2023, con el fin de mejorar la calidad del aire y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero, promoviendo una movilidad basada en el transporte colectivo y los medios activos peatonales y ciclistas. Sin embargo, Ecologistas ha expresado que «pese al drama sanitario y a la emergencia climática que tanto se proclama, el Ayuntamiento de Valladolid va a implantar esta medida con dos años y medio de retraso», y sobre todo con una delimitación y diseño que según concluye el informe encargado por Ecologistas en Acción a la consultora madrileña especializada en movilidad sostenible Gea21 S.L. «no cumple con la finalidad y requisitos establecidos por la Ley de Cambio Climático». Este informe será entregado por la organización ambiental al Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, mediante el que Ecologistas en Acción «pretende obligar al Ayuntamiento a que cumpla con su obligación legal de implantar una ZBE eficaz y ajustada a la ley«.
Según la organización se concluye que «ni la superficie delimitada ni las restricciones de acceso de la Ordenanza Municipal por la que se regula una ZBE en Valladolid, aprobada definitivamente por Acuerdo de Pleno EN octubre de 2024, son proporcionales a los objetivos de calidad del aire y mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero que se han dispuesto para dicha Zona». Además, «el amplio abanico de excepciones a las restricciones previstas de acceso, circulación y estacionamiento de vehículos no garantiza el cumplimiento de los objetivos cuantificables dispuestos para la ZBE», confirmando que el acceso libre de no residentes a los garajes del centro, entre otras exenciones y accesos temporales contemplados en la zona de tráfico restringido, convierten a ésta, según EA, en un «coladero» y en un «fraude de ley». La organización ambiental también considera «abusivo» el acceso libre a los aparcamientos rotatorios, que junto al «favorable tratamiento de los SUV privilegia la movilidad motorizada de las personas con más renta, contra lo anunciado públicamente por el equipo de Gobierno, ya que la población de bajos ingresos en general no dispone de coche o de dinero para la compra de combustible, siendo usuaria del transporte público y los medios peatonal y ciclista»
Finalmente, Ecologistas en Acción recuerda que las bases de las subvenciones del Ministerio por las que el Ayuntamiento de Valladolid ha recibido hasta el momento más de 15 millones de fondos europeos, obligan a que las zonas de bajas emisiones «incluyan una parte significativa de la ciudad, garanticen la reducción de emisiones y prevean la reordenación del espacio público en favor del transporte público, las bicicletas y los peatones». «Se trata de medidas que se vienen implantando con éxito en centenares de ciudades europeas desde hace medio siglo, incluyendo en España las de Pontevedra o Vitoria, y que podrían situar a Valladolid en la vanguardia de las urbes con mejor calidad del aire y mayor nivel de vida, siempre que se adopten con convicción y explicando que la única manera de limpiar el aire que respiramos es reducir el número de vehículos que circulan por nuestras calles», han reprochado. Dado que la actual Zona de Bajas Emisiones de Valladolid «no cumple los requisitos ni plazos legales», desde EA han solicitado al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible que reclame al Ayuntamiento «la devolución de los fondos europeos despilfarrados en una medida ambientalmente inútil, que se suma al desmantelamiento de los carriles bici y bus».
En última instancia, la organización ambiental atribuye la «responsabilidad» de que la ciudad no cuente con una Zona de Bajas Emisiones útil a la «negligencia y erróneo cálculo político» del anterior alcalde y actual ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que con el apoyo de Valladolid Toma La Palabra, a la mitad de su segundo mandato «se negó a implantar esta medida hasta pasadas las elecciones municipales que a la postre le desalojaron del poder, mostrando escasa convicción», han concluido desde Ecologistas en Acción de Valladolid.
El concejal de Movilidad responde: «Estamos ejecutando una ZBE más reducida, pero efectiva»
Ante las críticas y el anuncio de recurso de Ecologistas en Acción a la Zona de Bajas Emisiones en Valladolid, el Ayuntamiento, a través del concejal de Tráfico y Movilidad, Alberto Gutiérrez Alberca, ha respondido que le sorprende que Ecologistas en Acción presente un recurso «en algo que es mejorar la sostenibilidad ambiental de Valladolid, como es el comienzo de la Zona de Bajas Emisiones». «Realmente se ve claramente que hay una actitud más partidista e ideológica, que una realidad», ha expresado el edil. Asimismo, ha remarcado que «en Valladolid estamos cumpliendo las promesas que realizamos, estamos ejecutando una Zona de Bajas Emisiones más reducida, pero efectiva, y estamos cumpliendo con los fondos europeos que se nos han transmitido para este fin». Sin embargo, el concejal ha manifestado que «sorprende que Ecologistas en Acción no recurra al Ayuntamiento de Zamora, que está gobernado por Izquierda Unida, formación política a la que ellos apoyaron electoralmente y en la que ni siquiera está previsto, ni hay un calendario de implementación de la Zona de Bajas Emisiones, con las mismas obligaciones legales que tiene el Ayuntamiento de Valladolid».
Por lo tanto, el concejal del Área, Alberto Gutiérrez Alberca, ha asegurado este jueves que «realmente no es creíble esta actitud, siempre permanentemente judicializando este tipo de asuntos, solamente cuando gobierna el Partido Popular y evidentemente haciendo la vista gorda o tapándose los ojos cuando son formaciones políticas afines«. «Esto hace perder mucha credibilidad a la actuación de Ecologistas en Acción», ha finalizado el concejal de Tráfico y Movilidad de Valladolid.