La Guardia Civil de Valladolid en el marco de la denominada operación ‘Padillaro’, dentro de las actuaciones e investigaciones llevadas a cabo contra las sustracciones de cobre en la provincia, ha procedido a la detención de dos personas reincidentes, como presuntas autoras de tres delitos de robo con fuerza de cable de cobre y hurto de baterías en la provincia de Valladolid. La investigación se inició el pasado mes de mayo, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento mediante una denuncia presentada en sus dependencias por un delito de hurto en una cantera ubicada en la comarca de Peñafiel, en la que dos individuos a bordo de un vehículo, accedieron al interior de la explotación y sustrajeron baterías de grandes dimensiones instaladas en maquinaria pesada.
Posteriormente se recibieron otras tres denuncias por robos también en la comarca de Peñafiel. El primero de ellos cometido en el interior de una nave, de la que se llevaron unos 200 metros de manguera de cable y cableado de diferentes secciones de las arquetas y registros de toda la nave, valorando los daños y el material sustraído en varios miles de euros. El segundo robo se cometió en un yacimiento arqueológico, en la que sustrajeron diversa herramienta, un generador y tornillería, y el tercer robo se cometió en una finca agrícola en la que se llevaron parte del cableado eléctrico de la instalación de dicha propiedad, causando los autores daños en la alambrada de cerramiento. Una vez conocidos los hechos, y tras el estudio de los hechos delictivos se observó que éstos presentaban un mismo modus operandi, que llevó a determinar que estos serían realizados presuntamente por grupo criminal dedicado al robo de cobre y otros efectos que pudieran hallarse en los lugares de comisión de generador y herramientas.
Fruto de estas gestiones y pesquisas policiales, se logró identificar a dos personas que presuntamente participaron en los hechos, siendo conocidos de la Guardia Civil por otras operaciones policiales, habiendo sido investigados en el presente año por una afluencia de robos de cobre cometidos en trasformadores eléctricos ubicados en explotaciones agrícolas de la provincia de Valladolid, constándoles antecedentes por diferentes delitos, siendo reincidentes en sustracciones de cobre en explotaciones agrícolas e integrantes de un grupo criminal especializado. En cuanto al vehículo utilizado para la comisión de los hechos, una vez localizado, se estableció un control y vigilancia sobre el mismo, identificando a las personas que lo utilizaban, resultando difícil su localización debido a las fuertes medidas de seguridad adoptadas, que dificultaron tanto el control de sus movimientos como el de sus actividades criminales.
Gracias al estudio y análisis exhaustivo de diversa documentación, se logró localizar varias ventas de cobre realizadas por los investigados en establecimientos de reciclaje, que correspondía con el material sustraído en los hechos investigados. Los investigados se trasladaban a zonas rurales, donde aprovechando la ausencia de los propietarios, sustraían el cableado de cobre del suministro eléctrico y otros efectos que se hallaran en el interior de las edificaciones. Posteriormente se dirigían hasta centros de reciclaje de metales donde vendían de cobre sustraído, utilizando en algunos casos la identidad de terceras personas para desviar la localización de las ventas y así evitar la acción policial. Una vez recabado todo el conjunto de elementos indiciarios, se procedió a la detención de dos personas, vecinas de Valladolid, como presuntas autoras de un delito de pertenencia a grupo criminal, tres delitos de robo con fuerza y un delito de hurto de baterías en explotaciones agrícolas.
