La Junta de Castilla y León celebra los últimos datos del paro con una caída de 14.400 personas entre julio y septiembre en la Comunidad. Concretamente, este descenso supone un 12,60% menos que en el trimestre anterior en Castilla y León, una situación contraria a la que ha ocurrido en España con un aumento del 2,08% a nivel nacional con 60.800 desempleados más. Con respeto a la ocupación, el número a niveles autonómicos está por encima el millón de personas hasta las 1.022.000 y supera en un 2,44% los datos del mismo trimestre del año anterior con 24.400 personas ocupadas.
«A pesar de la coyuntura económica internacional y nacional, algo estaremos haciendo bien desde la Junta de Castilla y León para fomentar el empleo», así ha comenzado el secretario general de la Consejería de Industria, Comercio y Empleo, Alberto Díaz, en la valoración de los datos de la encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre del año. La cifra del paro baja de 100.000 desempleados hasta los 99.900 parados, y no se alcanzaban estos datos «desde 2008», detalla Díaz. Supone un descenso de trimestral del 12,6% e interanual del 10,3%, este último es el mejor tercer dato de los últimos 20 años.
A su vez, la tasa de paro en la Comunidad desciende a 8,9% y se trata del nivel más bajo desde el primer trimestre del 2008, y así Castilla y León se sitúa en el quinto lugar después de Cantabria. Tanto las cifras de paro y ocupados «no solo demuestran que estamos creando empleo y recuperando todo lo que se había perdido», resalta el secretario de Industria y Empleo.
Por todo ello, desde el Gobierno autonómico consideran que «gracias a la confianza y a la estabilidad jurídica que ofrece la Comunidad a las empresas de nuestra región se muestra como un territorio atractivo para la inversión y consolidación de iniciativas empresariales». A pesar de que algunos informes revelan que la situación «puede cambiar drásticamente» en cuanto a la previsión de crecimiento económico, con este motivo de la alerta de recesión económica, la Consejería va a seguir «apostando por unas políticas de empleo reales y efectivas focalizadas en programas que han demostrado una alta rentabilidad en términos de empleabilidad e inserción laboral», resalta.
Tal y como adelantó el consejero de Empleo, Mariano Veganzones, este año se está ejecutando el «mayor presupuesto de la historia en políticas activas de empleo invirtiendo 272,5 millones de euros». El objetivo es trabajar por «crear empleo y consolidar los puestos de trabajo, así como la calidad», concluye Alberto Díaz.
