Una batalla final y decisiva. El Real Valladolid vuelve a casa, al templo blanquivioleta, para buscar un triunfo que corte la mala dinámica de resultados y mantenga al equipo con opciones de pelear por la salvación. Ante su familia y su gente, en el Estadio José Zorrilla, el Pucela de Álvaro Rubio recibe al Celta de Vigo este sábado 15 de marzo a las 14.00 horas, en el marco de la jornada 28 en LaLiga EA Sports, a once partidos para la conclusión de la temporada.
Dos tendencias opuestas se citan en esta ocasión. La de los blanquivioletas, sin ganar desde el 11 de enero y que quieren volver a demostrar gen competitivo que haga sentir orgullo, a poder obtener un resultado positivo que deje atrás las derrotas consecutivas encajadas en los últimos meses. Con 16 puntos, el equipo cierra la Primera División. Por otro lado, el cuadro gallego disfruta de una cómoda novena posición con 36 puntos, y llega en uno de sus mejores momentos de la temporada, cinco partidos sin perder, tres de ellos con victoria, y sus dos salidas saldadas en empate. En el cara a cara son los visitantes los que presentan mejores números. Un partido que bucea en el origen de ambos clubes y que traslada a los vallisoletanos a 1931. Un duelo que afronta su capítulo 101 este sábado y que deja un rico histórico entre dos entidades fundadas casi al mismo tiempo. Además, precedentes positivos ya que en Zorrilla la moneda ha caído cara para los locales en más ocasiones.
Un encuentro en el que el Real Valladolid tratará de mejorar sus datos y sumar los tres puntos. El balance de goles es negativo para los dos equipos, aunque en el caso del vigués con un menos uno debido a los 40 goles a favor y a los 41 en contra. Es decir, en sus partidos ha habido una media de tres tantos; casi como en los del Pucela con 2,96. Eso sí, el Celta presenta mejores registros de disparos, con 224 totales y 118 a puerta. Mientras, el Pucela ha realizado 180, de los que 67 acabaron en la portería rival. El Real Valladolid se enfrentará a un rival que apuesta por jugar mucho con el balón. Así lo demuestran sus números, ya que el conjunto celeste acumula un 53% de posesión media y un 85% de pases acertados. Por otro lado, los pucelanos cuentan con un 43% y un 81%, respectivamente. En el apartado disciplinario, cada uno ha sido más castigado en los diferentes tipos de amonestación. Y es que el Pucela ha visto 71 tarjetas amarillas, por las 58 del Celta; y el equipo vigués ha sufrido cinco expulsiones, por las cuatro del vallisoletano.
Sylla, Moro y Amallah encabezan la lista de anotadores blanquivioleta, con tres cada uno. En el lado celeste destacan Iago Aspas, con ocho goles, y Mingueza, con cinco asistencias. El míster Álvaro Rubio explicó la dificultad del choque y también la sensación en la plantilla, con frustración tras los últimos resultados pero intención y trabajo para conseguir los tres puntos en casa. «Son momentos duros de mucha frustración, había que levantarles el ánimo, ese día es complicado pero sabiendo que la intención y el esfuerzo está ahí por parte de los jugadores», explicó el míster, al tiempo que señaló que «voy a poner a los mejores jugadores que puedan afrontar el partido en función de lo que veo en los entrenamientos y las características del rival». La convocatoria para el encuentro de este sábado la forman Hein, Rafús, Luis Pérez, Torres, Nikitscher, Javi Sánchez, Cenk, Sylla, Grillitsch, Marcos André, Iván Sánchez, Moro, Mario Martín, Cömert, Machis, Jurić, Amallah, Candela, Anuar, Chuki, Arnu, Chasco y Aznou.
Víctor García Verdura, colegiado catalán, será el encargado de dirigir la contienda, asistido en las bandas por Fernández González y Villaseñor Julián, y en la Sala VOR por Figueroa Vázquez. Los caminos del Pucela y del árbitro catalán se cruzarán por tercera vez. Las dos anteriores han sido este mismo curso, ambas a domicilio y con derrota blanquivioleta. La primera fue en el Santiago Bernabéu, donde el Pucela cayó por 3-0 frente al Real Madrid, y la segunda en El Sadar, donde el Osasuna se impuso por la mínima en un duelo que terminó con cinco amarillas para el Real Valladolid.