A por la primera victoria en El Alcoraz

El Real Valladolid busca este viernes su primer triunfo en uno de esos campos complicados para el equipo. El Alcoraz, en Huesca, es hasta la fecha un muro infranqueable en competición liguera, indistintamente de la categoría, ya que a lo largo de ocho choques se han cosechado allí cuatro empates y cuatro derrotas. Eso sí, existe un precedente para la esperanza, un partido de septiembre de 2017 de Copa del Rey.

Hay que remontarse bastante atrás en el tiempo para encontrar el primer duelo entre oscenses y pucelanos. Fue en Tercera División, el curso 1970-71, y el duelo disputado en el Campo de San Jorge finalizó con empate a uno, aunque la temporada acabó feliz gracias al ascenso a Plata.

Ya en el siglo XXI, y en El Alcoraz, el Real Valladolid ha visitado en LaLiga siete veces a los azulgrana, cinco en Segunda y dos en Primera, que configuran además los últimos duelos entre ambos contendientes. En la 2010-11 se volvieron a revivir los partidos en Huesca y ese año el Pucela cayó 1-0. Sacó tablas en la 11-12 (2-2, goles de Óscar y Javi Guerra) y en la 15-16 (1-1, Rodri) con mal sabor de boca ya que en ambos comenzaron los visitantes adelantándose, con tantos en los primeros minutos. Y se perdió por sendos 1-0 en la 16-17 y la 17-18.

En la máxima categoría del fútbol nacional se han registrado dos partidos entre SD Huesca y Real Valladolid. En el debut de los oscenses en Primera se produjo la derrota más abultada, por 4-0, temporada 2018-19. Mientras que en la 2020-21 el resultado fue empate a dos con dianas de Bruno y Waldo, un partido en el que de nuevo, como nueve años atrás, los locales igualaron un 0-2.

Sí existe, en el histórico, un motivo para la ilusión. Fue en la segunda ronda de eliminatoria copera, en septiembre de 2017, y los goles de Óscar Plano y Villalibre sirvieron para asegurar el pase y conseguir la que es, quizá hasta este viernes, la única pica puesta en Huesca.