Las autoridades veterinarias de la Junta de Castilla y León han notificado este lunes 13 de octubre un foco de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad, subtipo H5N1, en una granja de gallinas ponedoras localizada dentro de la zona de vigilancia del foco confirmado el pasado 6 de octubre en Olmedo, en la provincia de Valladolid. Con este caso, el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete, de referencia en España, ha confirmado once focos de IAAP en España en aves de corral en lo que llevamos de años, detectados uno en Badajoz, uno en Toledo, dos en Huelva, uno en Guadalajara, cinco en Valladolid y uno en Madrid. Además, desde el 1 de julio se han detectado 45 focos en aves silvestres en Andalucía, Extremadura, Galicia, Asturias, País Vasco, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Madrid y Cataluña, y dos focos en aves cautivas en el País Vasco y Andalucía.
La sospecha del nuevo foco se inició el pasado viernes 10 de octubre a partir de la comunicación de un incremento de la mortalidad a los Servicios Veterinarios Oficiales de la Junta. Ese mismo día se visitó la granja, con un censo aproximado de 66.000 aves, se inmovilizó de forma preventiva, se inició la encuesta epidemiológica y se tomaron las muestras oficiales remitidas al Laboratorio Central, que hoy ha confirmado la presencia de IAAP subtipo H5N1. La Junta de Castilla y León está llevando a cabo una intensa actividad de vigilancia y control de la enfermedad, con continúas reuniones de trabajo con las empresas afectadas que cuentan con naves de producción en diferentes ubicaciones en el entorno del municipio vallisoletano. Desde las consejerías de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Sanidad y Medio Ambiente del Gobierno autonómico trabajan de forma coordinada, junto al resto de las administraciones, para tratar de minimizar el riesgo de propagación de la enfermedad y proteger a las explotaciones, en aplicación del protocolo del Programa de Vigilancia de la Influenza Aviar en España de 2025 y el Reglamento Delegado de la Comisión Europea.
Entre otras medidas, se ratifica la inmovilización de la explotación afectada, el sacrificio y destrucción de las aves, la realización de la encuesta epidemiológica para conocer el posible origen y el establecimiento de una zona de protección de 3 kilómetros y una zona de vigilancia de 10 kilómetros alrededor del foco. El primer foco detectado se registró en el mes de septiembre en una explotación de gallinas ponedoras en la localidad vallisoletana de Olmedo, con un censo aproximado de 760.000 aves. A principios del mes de octubre, se notificaron otros dos nuevos casos de gripe aviar en sendas explotaciones ubicadas en las localidades vallisoletanas de Aguasal y Olmedo, considerados de carácter secundario al tener vínculos epidemiológicos con el primer foco comunicado el pasado viernes 19 de septiembre en la misma zona y en las que se tuvo que sacrificar a 102.000 animales avícolas. El protocolo para el cuarto foco se activó el lunes 6 de octubre en una granja de 90.000 gallinas ponedoras localizada en Olmedo, a unos 5 kilómetros del primer foco confirmado en el mismo municipio vallisoletano.